August 13, 2014

Una y mil veces

Las buenas nuevas son: Volví al francés.
Las malas noticias: Indefectiblemente, aunque pasen los meses, en algun momento, la enfermedad vuelve, a veces solo por unos dias, tan solo bastan unas horas para destruir el fuerte que construyo día a día y con mucho esfuerzo... He hecho dieta por tres semanas, dieta de la buena, de 900 a 1000 calorias diarias puras frutas, verduras y proteinas, al fin logre bajar a 57 (menudo reto señorita obesa, eh) la verdad que con mi 1,67 me conformaria con 52 kilos, aunque de vez en cuando fantaseo con estar en los huesos como la belle epoque, cuando pesaba 45 y no podia pararme por demasiado tiempo sin sentir mareos, usualmente, en medio de mi ensoñacion despierto al toque y me repito: se coherente Andrea, necesitas vivir. Vivir? Vivir digo? A veces ni siquiera subexisto, oh por dios, que afán el de engañarme.
En fin, lo de siempre: la realidad me golpea, no tan fuerte como para tumbarme, pero si lo suficientemente duro como para marearme y recaer. Siempre recaer.

1 comment:

Catastrophic said...

Durísimo ver los años pasar todos iguales. Qué te puedo decir, si además cada vez pasan más rápido aunque el tiempo te atrape como la tira de las moscas.

Me asombra que tengáis fuerzas para algo más. Tú con el francés, Dani con el alemán... Bravo. Las distracciones :)